Errores que cambiaron la historia: el lado oscuro del mal QA
- Medio Melón
- 19 may
- 2 Min. de lectura
Cuando pensamos en errores de software, solemos imaginarnos un bug molesto que hace que una app se cierre inesperadamente o una página que no carga bien. Pero en la historia del desarrollo tecnológico, algunos errores pasaron desapercibidos... hasta que fue demasiado tarde.
Y muchos de ellos tienen algo en común: una falta (o falla) en el Quality Assurance.
Hoy te compartimos una recopilación de errores reales que dejaron en claro por qué el QA no es opcional —es esencial.

Caso 1: El satélite que olvidó el punto y coma
En 1999, la NASA perdió el satélite Mars Climate Orbiter. ¿La razón? Uno de los equipos usó el sistema métrico y el otro, el imperial. Nadie lo validó.
Un error de conversión hizo que el satélite se desintegrara al entrar en la atmósfera de Marte. Costo estimado: 125 millones de dólares. QA brilló por su ausencia.
Caso 2: El auto que aceleraba solo
Toyota vivió una pesadilla en 2009: cientos de reportes sobre autos que aceleraban sin que el conductor lo hiciera. ¿El culpable? Una combinación de errores mecánicos y fallos en el software del sistema electrónico.
El error le costó a la compañía más de 2 mil millones de dólares en multas y compensaciones, y lo más grave: se relacionó con la muerte de más de 30 personas.
Caso 3: El bug bancario que pagó de más
En 2012, un banco británico transfirió casi el doble del salario a más de 30 mil empleados del gobierno. El error fue causado por una mala actualización en el sistema de pagos. QA no había probado todos los escenarios posibles.
El problema se corrigió, pero el daño reputacional fue enorme. Y no faltó quien decidió “irse de vacaciones” con ese dinero extra.
Caso 4: El bug que expuso millones de contraseñas
¿Recuerdas Heartbleed? En 2014, este bug afectó la seguridad de millones de servidores en todo el mundo. Permitía robar información como contraseñas o claves privadas sin dejar rastro.
El error estaba en una librería de código abierto muy usada (OpenSSL) y pasó meses sin ser detectado. Faltaron pruebas de seguridad. Faltó QA.
Entonces, ¿por qué falló el QA
En muchos de estos casos, QA no era parte del proceso desde el inicio, o se trató solo como una etapa final que se podía apurar.
El problema es que QA no se trata solo de “probar si algo funciona”, sino de ver si puede fallar, prevenir el caos y proteger al usuario (y a la empresa).
Lecciones para llevar
QA debe estar presente desde el diseño del producto.
No basta con pruebas automatizadas: también se necesita pensamiento crítico.
Los errores reales no avisan... pero el buen QA los anticipa.
🎯 En resumen:
Las prácticas de calidad pueden parecer invisibles; sin embargo, el mal QA (o ausente), deja huellas que pueden costar millones —o algo peor.